31 de marzo de 2011

La invasión de los poetas funcionarios zombis IV (tráiler oficial)

Como sabrán quienes siguen la saga, llegaba tarde a mi cita lo cual, dado que soy el autor de la historia, podía ser crucial para el transcurso de la historia misma. Había llegado a plantear que, dado que era el autor de la historia, podía cambiarla a mi antojo y no llegar tarde a mi cita pero eso me llevaría a emplear un recurso narrativo bastante desafortunado. Una cosa es decir “hoy” todos los días que uno empieza a escribir, porque son, efectivamente, “hoy” en el momento en el que uno escribe y otra cosa es andar mareando al lector desprevenido. Pónganse en mi lugar, entiéndanme, con lo que me ha costado hacer creer al público que llegaba tarde ahora tendría que quitarle esa idea de la cabeza y reemplazarla por otra.

Discurría sobre toda aquella problemática cuando, de súbito, una nave espacial me atropelló en un paso de código de barras. Antes se llamaban pasos de cebra pero como las cebras se extinguieron en el año dos mil cien, cambiaron de nomenclatura. Huelga decir que fallecí en el acto. Los códigos de barra no se habían extinguido y esto es curioso, de otro lado.
Ante esto, se encontrarán terriblemente contrariados porque si bien muestro abiertamente mis reticencias para afirmar una cosa y luego negarla (el caso de cambiar la historia) no tengo reparos en decir que estoy muerto. Si estoy muerto no puedo escribir y esto resulta mucho menos verosímil que llegue puntual a una cita ficticia.

Año 2250. Las máquinas no tardarán en dominar el planeta. Nuestro narrador había estado a punto de morir a manos de un poeta funcionario zombi pero al final su vida se extinguiría con el atropello de una nave espacial.

Cathie – Oh, John, ¿qué pasará ahora? Sin el narrador de la historia tú y yo no existiremos más.
John – Ese no es el problema, Cathie, se avecina algo mucho peor.
Cathie – ¿Qué quieres decir, John?
John  – No puedo decir nada, no puedo hacer nada.... ya la trama no existe, somos entelequias desconectadas de su demiurgo. Estamos condenados a desaparecer.
Cathie – Entiendo John pero ahora… ¿acaso ahora no estamos conversando? Quiero decir… ¿y si la historia no la hubiera inventado el narrador de la historia?
John – ¿Qué insinúas Cathie?
Cathie – No lo sé John, todo esto es nuevo para mí. Quiero decirte ¿y si tú y yo existimos libremente y podemos… podemos obrar libre y autónomamente… y si…?

En ese mismo momento Cathie queda paralizada por un cortocircuito en su placa base.

Si disfrutaron con


Si les sorprendió


Si se emocionaron con


Llega ahora


Enfermera – Doctor, venga, esto es muy extraño.
Doctor – Yo aquí veo un caso típico de enajenamiento poeta funcionario zombi ¿le extraña ver un zombi? Dígame enfermera ¿no es acaso usted misma un zombi?
Enfermera – Sí, doctor, y también poetisa y funcionaria pero es que este paciente que ha salido de su tumba no sabe hacer poesía.
Doctor (consultando el historial) – No lo entiendo. Quizá hay un gen recesivo en la cadena o…
Enfermera – Antes de morir era el autor de la historia, quizá eso le impide ser poeta.

LA INVASIÓN DE LOS POETAS FUNCIONARIOS ZOMBIS IV
Próximamente

29 de marzo de 2011

La propuesta pública


















 










Con motivo de su veinticinco aniversario, el Consorcio de transportes de la Comunidad de Madrid ha organizado una curiosa propuesta. Consiste en sacarse una foto desde el lugar indicado con un logotipo de fondo en una trasera o photocall. Las fotos enviadas por los ciudadanos se expondrán en un foto-mosaico, en una muestra que refleja la evolución del transporte público a lo largo de su existencia.


Con esta actividad, el Consorcio quiere reforzar el papel protagonista de los usuarios, puesto que son ellos los que han hecho crecer y dan sentido al transporte público.














Nosotros también quisimos participar pero mucho nos tememos que nuestras instantáneas no serán expuestas en el mural debido a que no aceptan las reglas del juego del consorcio. Es una pena porque nos llevó bastante trabajo conseguir capturar el vuelo de un avión de papel en el photocall. El avión de papel representa a la perfección la precariedad de ciertos aspectos del transporte público que, por lo menos, en la comunidad de Madrid, no es de los peores. 














El avión acabó estrellado en una máquina expendedora de cultura.

Recientemente Metro de Madrid ha organizado un concurso de fotografías hechas por el móvil. Como condición, no se admitirán fotografías que estén realizadas ni en el interior de los trenes ni donde aparezcan menores, personal de seguridad o personal del propio servicio de metro. Me parece curioso que en el actual anuncio de Metro de Madrid precisamente el protagonista sea un menor y curioso que en el concurso se trate de regular y ofrecer sólo aspectos favorables a la imagen de Metro de Madrid. Es lógico que si Metro de Madrid organiza el concurso no quiera enseñar sus vergüenzas pero, mostrando una imagen maquillada de la realidad no podemos evitar caer en una especie de anuncio donde, como en el propio anuncio de Metro de Madrid, todo parece estar controlado, limpio y ordenado.  Viendo sólo lo que nos agrada ver perdemos capacidad de autocrítica y el asunto se convierte en mera recreación onanista. En cuanto a la tendencia de que los usuarios sean los protagonistas... juzguen ustedes si no les parece acaso una ingenua estrategia de marketing. Si no quieren pensar así, lean el slogan con optimismo desprendido de cualquier tipo de ironía;


Transporte de Madrid
Lo importante eres tú

Caras














En los escenarios vigilados y ocupados por mensajes legales, en la gran mayoría de los casos consumistas, se desarrollan prácticas artísticas más o menos profesionales y más o menos subversivas. A veces, perfectamente mimetizadas con el entorno.


Banco














El dinero en el colchón crece un montón, colocado estratégicamente en el cajero de una sucursal bancaria.

17 de marzo de 2011

Frank Magnotta

Queremos destacar los trabajos del estadounidense Frank Magnotta, en especial, aquellos que contienen tipografías. Magnotta trabaja el grafito en grandes dimensiones. 





















Las tipografías apiladas, con mensajes del tipo belleza, bigbang, dulce, defiéndete, permanece en guardia, quítate esa máscara, pájaros de América... nos acercan a un método de construcción surrealista que da lugar a monstruosas edificaciones artificiosas con elementos antropomorfos. Habría que preguntarle a Frank si toda esta imaginería no es acaso una pesadilla consumista y publicitaria o simplemente un desarrollo formal y dibujístico arbitrario e inconsciente.

Para consultar más obras de este autor, puedes visitar su portfolio.

Nota: Hemos descubierto esta obra gracias a la labor divulgativa del Colectivo Bicicleta, un grupo bastante activo del entorno Facebook dedicado a difundir obra de ilustradores y diseñadores, principalmente.

16 de marzo de 2011

Magalli Salazar

Para la autora, el arte, al adentrarse en terreno público, permanece en estrecha relación con la vida cotidiana. Dicho arte posee connotaciones lúdicas y se opone al tradicional ilusionismo donde conceptos como participación o interactividad son clave. También el arte sirve para liberar al individuo de las imposiciones propias del entorno urbano. Enunciado por la propia autora:

“En el arte siempre existe un juego que revierte el fenómeno de las apariencias, lo que provoca un encuentro con lo real, se trata de revelar o transformar la realidad aparente y provocar con ello una dinámica de reflexiones en torno a nuestro espacio físico y emocional”.

En Auriga, se invitaba al ciudadano a dar un paseo en un carro por uno de los parques de una ciudad de México. A cambio, los participantes debían seguir las instrucciones de un manual con el que elaborarían un particular atuendo. El auriga, el viaje, la acción, se presentan en esta obra como una metáfora de construcción personal. Paralelo a todo ello, la autora elabora un discurso sobre el cuerpo, el cual existe entre la unión de lo imaginario y lo físico. El cuerpo, en el espacio urbano –según destaca Magalli Salazar– está sometido a modelos que refuerzan lo cotidiano por los cauces de la normatividad y la productividad. El cuerpo es vigilado, controlado, observado y sometido, frente a lo cual se establece la práctica artística, que en un tránsito lúdico cambia las reglas de la realidad.
















En Ambulantes, los participantes, mediante el tránsito y la ocupación del espacio público, reivindicaban la recuperación de un espacio cuya reestructuración arquitectónica está imposibilitando la convivencia.















En Terapia física, la autora emplea la reflexología, una terapia de contacto físico a cambio de información sobre la vida privada de los participantes. De corte similar es la obra Cultora de ideas, en donde Magalli lavaba el cabello de los visitantes a cambio de su propio cabello, con el que escribiría las ideas de lo que para los participantes significaba algo bello. 

Finalmente, reseñamos esta obra: Sueño de una tarde sabatina en Chapultepec, en el que los artistas involucraron en sus prácticas lúdicas a los ciudadanos. Destaca la actividad de Magalli conectada permanentemente con el ciudadano anónimo y en estrecha colaboración con la comunidad artística.

Puedes consultar más detalles o más obras de la artista en la siguiente dirección: 

11 de marzo de 2011

La invasión de los poetas funcionarios zombis III

(Viene de la entrada anterior)

Agente gubernamental – ¿Es usted el autor de La invasión de los poetas zombis II?
Autor de la historia – Sí, ¿qué desea, un autógrafo?
Agente gubernamental, mirando fijamente a los ojos de su interlocutor – Entre en casa sin hacer ruido, por favor.

Después de guardarse la placa acreditativa de la OIPP, el agente gubernamental extrajo una pistola láser de su chaqueta y con ella indicó el camino al autor hasta el salón. Luego se enfundó unos guantes higienizados.

Nuestro autor estaba desconcertado porque aquel no parecía un emisario del departamento de represión sexual y empezaba a temerse lo peor. En vista de ello decidió mantener la calma y tratar de no ofrecer muestras de nerviosismo.
AH: Empecemos con la entrevista, pues. ¿Va a preguntarme cómo descubrí que los funcionarios zombis estaban en apuros?
El agente gubernamental permaneció en silencio y se entretuvo en cargar la batería de su pistola láser, con gesto de desdén.

AH: Había descubierto una máquina del tiempo, la escritura.

La escritura es una herramienta capaz de deshacer la realidad en pedazos, pero esto le importa poco a la realidad.

Los  poetas funcionarios zombis, una vez extinguida la amenaza capitalista, empezaron a no hacer su trabajo, delegando esta tarea a máquinas cada vez más sofisticadas y perfectas. Pero, entresijos de la trama, los dueños de estas máquinas no eran otros sino los mismos capitalistas, quienes habían creado una red empresarial de la que no se sabía que eran propietarios.

El agente gubernamental aferró un cojín del sofá y zancadilleó al autor, de manera que quedase de rodillas sobre la alfombra del salón. A continuación, impulsó la cabeza del autor con la mano enguantada que tenía libre hacia el pecho del propio autor, colocando el cojín a modo de silenciador entre la cabeza del autor y la pistola. Iba a apretar el gatillo cuando un señor del público interrumpió la escena.

Señor del público: Un momento, agente gubernamental, si mata al autor todos sus personajes, incluido usted, ya no participarán en el desarrollo de la trama.
Agente gubernamental: Es igual, desde que las máquinas pugnan por dominar el planeta Tierra la vida no tiene sentido aquí. Mejor cortarla por lo sano y acabar con todo de una vez y para siempre.
Señor del público: Pero deje al menos acabar la historia al pobre hombre.
Señora del público: ¿O que cambie la historia no? Para eso es el autor.
Autor: Antes muerto. ¡Moriré defendiendo mis ideas!
Agente gubernamental: Termine su historia, luego terminaré con usted.
Autor, tras carraspear: bien, cursiva, por favor

Antes de que los capitalistas volvieran a tener capital gracias a la venta de máquinas al Estado, las máquinas acabaron siendo tan inteligentes que crearon el primer robot autónomo: el PZ-250. A este modelo siguieron otros como el PZ-251, en el marco de un proyecto militar. Como ya adivinarán los lectores dicho proyecto se les fue de las manos a los poetas funcionarios zombis y el PZ-251 aniquiló a toda la población, incluidos funcionarios zombis y capitalistas rebeldes.

Señor del público: ¿Y aquí acabará la saga?
Autor del blog: No, de ningún modo. Después de lo acaecido, los poetas funcionarios zombis resucitarán y saldrán de sus tumbas, listos para aprobar las oposiciones de nuevo.
Agente gubernamental: ¿Resucitarán? ¿Quiere decir que vamos a morir y luego a nacer?
Autor del blog: Sí, más o menos, solo que esta segunda vez que nacéis lo haréis un poco más podridos.

Entonces, el agente gubernamental soltó la cabeza del autor con desprecio y abandonó el salón. El autor se incorporó trabajosamente y consultó su reloj de pulsera. Eran las siete y llegaba tarde a su cita.

La invasión de los poetas funcionarios zombis III (tráiler oficial)

Hoy me he dado cuenta de que repito mucho la palabra “hoy” cuando empiezo a escribir. Para un escritor de mi talla esto, sin lugar a dudas, podría suponer un gesto ciertamente vergonzoso pero, al cabo, me he concedido a mí mismo la justificación precisa para interpretarlo como una suerte de recurso estilístico conscientemente deliberado, meditado y, de otra parte, la mar de original e interesante.

Acto seguido, nuestro narrador toma un sorbo de café y se entretiene en mirar por la ventana mientras medita sobre los cauces narrativos por los que navegará su pintoresca historia.

El arte de la escritura -escribe- entrará en desuso dentro de no demasiado tiempo. Sí, en el futuro dictaremos a las máquinas y ellas escribirán por nosotros. Luego empezarán a descifrar nuestros pensamientos y al final, después de que su inteligencia nos sobrepase, exterminarán al ser humano como especie.

Esto vendrá después de:


Próximamente, en sus pantallas:

LA INVASIÓN DE LOS POETAS FUNCIONARIOS ZOMBIS III
La esperanza capitalista

Cathie – Oh, John, ¿qué pasará ahora? Los funcionarios zombis están aprobando las oposiciones.
John – Ese no es el problema, Cathie, se avecina algo mucho peor.
Cathie – ¿Qué quieres decir, John?
John  – Si pudiera… si pudiera hacer algo… hazme un favor Cathie, alcánzame el mando de la televisión
Cathie – Sí cariño.

En ese momento Cathie se queda paralizada, las baterías que alimentan su cuerpo de androide se han agotado. John arrastra su silla de ruedas hacia la ventana de su piso con gesto de fastidio; luego se dirige al cajón y extrae su identificación del Ejército de Papá Noel y queda contemplándola con mirada perdida.

John – Si pudiera…

Año 2250. El narrador de nuestra historia deja de escribir bajo el pretexto de que se le está haciendo tarde. Esto ocurrió después de confundir un holograma de Belén Esteban con la propia Belén Esteban. En ese mismo momento, al abandonar su casa, un trajeado agente gubernamental le corta el paso emitiendo pitidos cortos con el silbato. El narrador descubre al momento que es un zombi de uno de los departamentos de la OIPP

Agente gubernamental – ¿Es usted el autor de La invasión de los poetas zombis II?


Próximamente

Modelos de conducta sexual en España

Los modelos que vamos a presentar a continuación aparecen en la publicación Guía práctica de la sexualidad masculina, escrita por Julián Fernández de Quero[1]. Responden a estudios realizados por Joseph Vicent Marqués y son, a nuestro juicio, bastante aproximados a la realidad histórica que los españoles hemos padecido. Resulta interesante observar las descripciones, y, sin duda, dan bastante que pensar.

Modelo clerical- represivo:

Por fortuna, actualmente, en decadencia y sólo prevalece en grupos minoritarios de personas imbuidas de algún tipo de religiosidad. Dominante en el s. XIX, la sexualidad se manifiesta como un instinto pernicioso del que hay que defenderse. Sólo está socialmente permitida cuando sirve para la función reproductora, dentro del matrimonio, con o sin afecto. De la sexualidad, o no se habla o se habla para prevenir contra ella, como pecado mortal que es. El varón sufre el sexo como una enfermedad hereditaria, debe fortalecer su voluntad y, si a pesar de todo, cae en la tentación, puede confesarse como último recurso. La mujer no tiene sexualidad; ha nacido para ejercer la función sublime de esposa y madre, si demuestra su gusto por el sexo está poseída por el demonio. Está obligada a mantener con su marido relaciones por débito conyugal con la intención de dar hijos a Dios. Todo comportamiento sexual alejado del coito reproductor matrimonial está mal visto, también la conducta masturbatoria y la homosexualidad (ésta última es la perversión mayor de todas). Las fantasías están prohibidas lo cual ha llevado a muchos estudiosos a interpretar las fantasías místicas como una forma enmascarada de erotismo. Sus agentes portavoces son los sacerdotes religiosos.

Modelo burgués-tradicional:

Permanece en la actualidad en clases medias y bajas de nuestra sociedad. La sexualidad es vista como un peligro para la estructura social (es mala para las mujeres, porque las convierte en prostitutas; es mala para los obreros, porque les impide trabajar) pero, al mismo tiempo, es divertida para el varón burgués. Sigue el principio de haz lo que te digo pero no lo que hago. El burgués tiene un discurso negativo en casa, en las instituciones, con los niños… y un discurso grosero en los círculos exclusivos de varones adultos. El varón es un cazador; lo importante es la cantidad de piezas cobradas aunque para ello haya de jugar sucio. Los chistes y humoradas clásicas del español (los llamados chistes de sal gorda) son típicos del machismo más exacerbado. Los ideales masculinos se reflejan en la literatura libertina y romántica a partir de personajes como don Juan Tenorio, Giacomo Casanova… La mujer es divida en dos clases: La decente, educada par ser madre y esposa asexuada, que se atiene a los valores del modelo anterior y la viciosa, que se deja llevar por sus instintos sexuales. Mientras que al hombre se le reconoce su sexualidad como algo positivo, la mujer debe poseer las características del varón del modelo anterior. La actividad sexual típica se manifiesta en el débito conyugal requerido por el varón y sufrido por la mujer y, fuera del matrimonio, las demás actividades sexuales llevadas a cabo por el varón y la mujer viciosa. Como en el modelo anterior, todo comportamiento sexual alejado del coito reproductor matrimonial está mal visto, pero ahora este comportamiento perverso es deseado y buscado siempre y cuando permanezca en el submundo social. La fantasía dominante en el varón es el harén moruno, versión idealizada del machismo oriental. Sus portavoces son hombres.

Modelo capitalista-permisivo:

Surge a partir de la finalización de la II guerra mundial y se desarrolla en la sociedad de consumo, en el estado de bienestar. La sexualidad es una capacidad humana positiva, para hombres y mujeres, sin distinción de clases ni condición social. Esta capacidad hay que desarrollarla para que se convierta en elemento fundamental del matrimonio. Viene marcada por una divulgación científica y pornográfica; la sexualidad es objeto de consumo, conviene invertir en ella bien en conocimiento, bien en actividades lúdicas eróticas. El varón ahora es valorado ya no por su deseo inagotable sino por su habilidad para provocar placer a su compañera. La mujer pone el capital (su cuerpo) que es algo inerte y pasivo y el hombre pone su esfuerzo, dando como resultado la plusvalía que se lleva de ella. El nuevo machismo no es el del amo, sino el del ejecutivo responsable. La mujer ya es portadora del deseo sexual pero no es dueña de él. Su placer depende de las técnicas masculinas. En teoría no existe comportamiento perverso aunque sigue habiendo cierto rechazo a la homosexualidad. Las fantasías dominantes son el orgasmo simultáneo (como expresión perfecta del correcto ajuste de la pareja) y la cama redonda (versión actualizada y democrática del harén moruno). Sus portavoces son los técnicos: médicos, psicólogos y otros profesionales de la sexología.


Hay que tener en cuenta que los historiadores de sexología sitúan la aparición del amor en la alta Edad Media occidental. Antiguamente la relación sexual que los hombres mantenían con las mujeres era de posesión de objeto y dichas relaciones eran bastante similares a las de los animales.

[1] Guía práctica de la sexualidad masculina. Fernández de Quero, Julián. Ed. Temas de hoy. 1996

10 de marzo de 2011

Entrada conmemorativa

Esta publicación, la entrada número 300 de este blog, está escrita a modo de íntima celebración. A lo largo de los casi cuatro años de su existencia, este blog ha recibido cerca de unas siete mil visitas, principalmente de España y, en menor medida, de Latinoamérica y Estados Unidos. Para hacernos una idea, este mismo número de visitas pueden ser registradas en un solo día de tráfico normal por el contador de visitas de un blog algo más prestigioso. Pero, como todos sabemos, cantidad y calidad son conceptos que no siempre vienen relacionados.

El título del blog, Las torres de papel, es también el título de una obra literaria del autor (Ainiktés) cuya revisión algún día será emprendida. En principio, surgió en el marco de unas prácticas universitarias y, en la actualidad, pugna por integrar ámbitos de internet y de la urbe, en la gran mayoría de los casos con un enfoque artístico. Como asidua colaboradora que cuenta con su propia sección apareció Ju en el año 2008. Ju ha realizado prácticas artísticas y labores de revisión de contenidos, prefiriendo el anonimato en internet y, en muchas ocasiones, la no publicación de muchos asuntos que han rondado por la cabeza a los autores.

Actualmente las publicaciones que más visitas reciben son las de logotipos modificados.

La gente suele encontrarnos a través de tags como: Torres de papel, amnesia haze efectos, las torres de papel, busto bocanegra, moho marihuana, lastorresdepapel.blogspot.com, pinturas abstractas, poesía caligrama, poesía de caligrama o marihuana con moho blanco.

De lo cual deducimos que la gente nos encuentra
1.        Por el título de la página
2.        Por asuntos relacionados con marihuana
3.        Por prácticas artísticas

Estamos, los autores, muy satisfechos con nuestro trabajo libre y desinteresado y queremos, en esta entrada homenaje, agradecer a todos los que nos han visitado, nos siguen o nos han comentado, también a los artistas que, de manera constante, han intervenido en el blog.













Ahora es cuando descorcharemos la botella de cava y lanzaremos confeti al aire. Arriba podéis ver la cabecera original y la cabecera actual. Como anécdota, Las torres de papel contó, hace tiempo, con una sección de contabilidad. La primera entrada, Exordio, data de mayo del año 2008.

Nuevas prácticas en el espacio natural

Nuestro amor por el paisaje ya no es objeto de contemplación, de pura fusión, incluso de éxtasis. No, es objeto de discusiones, de estrategias, de acción
[Anne Coquelin].

Un ejemplo de que las prácticas artísticas ya no se rigen por los mismos principios es lo que podríamos denominar como arte translativo. Si antes el pintor se trasladaba al entorno natural para elaborar sus cuadros, ahora lo natural se traslada hasta el perímetro de lo artificial, convirtiéndose la materia en espectáculo. Ejemplos de ello son obras como 35 metros cúbicos de agua de mar (Pino Pascali) o Sin título (doce caballos vivos) de Jannis Kounellis. El ideal romántico consistía en creer que la cultura nos alejaría de la naturaleza, la corrompería. De otro lado, este arte translativo podría ser considerado como una evolución modernista de la que el ready-made duchampiano constituyó, en su momento, la inauguración histórica.

“Me pareció que si era verdad que numerosos artistas no habían dejado […] de multiplicar y diversificar sus modos de aproximación al medio natural, era, sin embargo, imposible sacar una idea de naturaleza que les fuera común. La extrema diversidad de las actitudes, de la búsqueda de una relación fusional en Hamish Fulton (estar en la naturaleza es una reacción directa), del respeto ecológico de Andy Goldsworthy (trabajo con una hoja debajo del árbol bajo el que cayó), al enfrentamiento prometéico con un medio hostil en Smithson (la Tierra, propensa al cataclismo, es un maestro cruel) Robert Smithson (el arte no se funda (…) sobre la creación sino sobre la descreación, no sobre la naturaleza sino sobre la desmaterialización), de la ironía distanciada de un Paul-Armand Gette, a la restauración de una relación mágica con el mundo, sobre el modelo chamánico de Beuys. Sin hablar de los numerosos artistas que salieron de los estudios empujados mucho menos por cualquier deseo de vuelta a la naturaleza que por motivos de orden formal –búsqueda de nuevos soportes- o por el rechazo de los circuitos del mercado estudio-museos-galerías”
[Colette Garraud].

Efectivamente desde de Christo a Boezem, pueden observarse intervenciones colosales en el medio natural hasta el simple gesto de firmar en el suelo.

Entre la fijación del paisaje, preludio al gesto decorativo, y el deambular exploratorio que quisiera no cesar, hay, sin lugar a dudas, una diferencia de enfoque en el marco natural. Apropiación en un caso, travesía en el otro. Opción paisajística aquí y opción de aventura allá.

Para cerrar el ensayo, destacar la obra de Jerôme Sans, quien reunía a un grupo de críticos, los subía en su coche, y los hacía observar el entorno natural desde un observatorio elegido por él, a veces incluso construido por él. A través del observatorio se encuentran experimentadas la inutilidad de ver todo y la prelación que se otorga al ver bien, a ver lo bello, a ver lo que vale la pena ser visto. Un observatorio de artista, es casi la oferta de un cuadro, pero dispuesto en el espacio natural en el seno del cual el artista delimita un marco, en una perspectiva de agrado o de reflexión sobre el status de la naturaleza. 

Extracto de Un arte contextual. Creación artística en medio urbano, en situación, de intervención, de participación. Ardenne, Paul. Cendeac.

Narrativa

He vuelto a visitar la comunidad artística deviantart con el motivo de ampliar la sección callejeros. Realmente merece la pena investigar en aquel espacio siempre y cuando se tenga presente que se va a perder bastante tiempo hasta dar con algo interesante. Esto, bien mirado, hace que los hallazgos tengan más valor si cabe. El problema, a mi ver, no es que los usuarios se dediquen a publicar contenidos poco elaborados, que también, sino que, para disfrutar de una lectura adecuada, debes de ingresar en la cuenta de los gestores de la página deviantart el pertinente canon para disfrutar de unos servicios que facilitarían mucho la búsqueda de arte. Sin estos servicios, los espectadores accedemos con muchas dificultades a las obras y los artistas, por consiguiente, tienen una visibilidad muy reducida.

La narrativa en el caso de obras, es un elemento que puede atrapar al espectador ávido de historias. Son elementos narrativos lo que he encontrado en la galería de Bella Elizabetta, en una sección dedicada al trabajo con tipografías.


La elección del color azul es tremendamente acertada ya que no hay forma mejor de representar cielo y mar, divididos por el horizonte. La historia nos habla de la terrible paradoja de lo que podríamos considerar un amor platónico. Pertenece a una serie titulada cita al día y ésta, en concreto, correpondía al día veiniticinco.


Cuando él beba su cerveza, gritará; ella, en cambio se recostará mientras bebe su tónica. Adviértase cómo están dispuestos los elementos formales de la imagen, sus contornos (rígido-curvo) y su situación (arriba-abajo), lo cual refleja perfectamente la polaridad entre los dos sexos recogida en la frase. Esta cita correspondía al tercer día.

Esta tercera obra ilustra una frase de van Gogh: Soñé mi pintura y después pinté mi sueño.


Finalmente, recogemos un trabajo perteneciente a una trilogía. La autora, en esta ocasión, ha escogido citas de la película The prestige y se mostraba muy sensibilizada por una posible violación de derechos de autor. En lo que a nosotros nos atañe, avisaremos a la autora de la presente publicación. En la siguiente galería se pueden consultar el resto de obras, previo paso por el registro y la aceptación de normas y condiciones de uso de deviantart.

Volviendo pues, a deviantart, después de lo afirmado con cierta desilusión, hay que reseñar que constituye una comunidad bastante activa en la que los usuarios no dejan de intercambiar impresiones. Como ejemplo, esta misma autora ha invitado a dejar comentarios y, como respuesta, se compromete a decirnos una serie de cosas sobre nuestro propio espacio virtual. Hemos decidido, por descontado, enlazarla y participar en su propuesta interactiva.













Plantilla del escritor Pix. Interesante el uso del color y el hecho de que había colocado a estas señoritas comiendo chicle en respectivos baldosines.

El hospital

  
Aunque parezca un centro comercial, nos encontramos en un hospital, concretamente, en el  nuevo y flamante Hospital universitario Puerta de Hierro. Los pacientes, si se aburren, pueden realizar sus gestiones bancarias o compras pertinentes en esta galería situada a la entrada. Supongo que los hospitales, lugares bastante poco gratos de visitar, serán ahora más atractivos gracias a los mensajes publicitarios de los comercios.

 Unos ascensores de uso público conectan las distintas plantas con sus respectivas salas de espera.














Algún paciente aburrido o quizás algún familiar (porque no creo que el personal sanitario se entretenga en estas prácticas) había intervenido directamente los dos carteles que hemos podido observar. La discreción de la acción, puedo intuir, asegurará la permanencia de esta obra por un buen tiempo ya que incluso yo mismo, siempre a la caza del talento callejero, estuve a punto de pasar por alto este singular y cómico detalle.

Se me ocurre también cambiar ascensor por censor.

8 de marzo de 2011

Reflexiones

No se puede decir nada nuevo. Tampoco es nuevo decir que no se puede decir nada nuevo. Quizás sí sea nuevo decir que no es nuevo decir que no se puede decir nada nuevo, pero resulta tan evidente que seguramente no lo sea.

Además de evidente, puede prestarse a ser considerado como una soberbia chorrada, de otro lado.

Ciudad

6 de marzo de 2011

Chismes

Hoy tengo intención de referirles una historia del todo trivial, anecdótica y –por qué no avisarlo– sin demasiada enjundia. Ocurrió un día cualquiera, un día de esos en los que podemos despreciar el simulacro literario para construir un escenario atrayente. Ese día cualquiera en el que no determinaremos si hacía frío o calor, si era pronto o tarde, si el viento azotaba las copas de los árboles o la niebla desenfocaba los contornos de los edificios… ese día cualquiera recibí un mensaje de correo electrónico. Su autora, a la que llamaremos A con motivo de proteger su identidad, agradecía el hecho de que le hubiera facilitado mi dirección de correo con motivo de que intercambiáramos, por esa vía, información personal. También aseguraba que teníamos un alto porcentaje de compatibilidad en el test de una página web, una suerte de red social donde la gente podía buscar pareja y a veces encontrarla.

Debo reconocer que el

COMERCIAL

de la página web aquella emitido por televisión resultaba bastante atractivo pero no, definitivamente, jamás yo había dado de alta una cuenta en ese servicio. Tampoco había facilitado mi dirección de correo a A ni, por descontado, había hecho un test de compatibilidad. Lo cual me llevaba a sospechar que se trataba de un

SPAM

Y me deshice del correo. Otro día cualquiera en el que no acierto a recordar si era especialmente literario y fascinante, recibí el mensaje de quien nombraremos B, comunicándome sus predilecciones por los viajes, la naturaleza y el baile. B, además, adjuntaba una foto suya. La imagen retrataba a una señora de unos cuarenta o cincuenta años posando junto a un perro pequeño y blanco, posiblemente suyo y de aspecto bastante saludable. Era un primer plano de modo que no se podía determinar bien si los dos se encontraban en un jardín o un parque pero la abundancia de tonalidades verdes en la foto aseguraba que los retratados disfrutaban de un entorno natural.

La apariencia de este mensaje y otros que vinieron después me llevó a pensar que aquello no era correo basura, sino mensajes de particulares que habían confundido la dirección del destinatario. Confusión que, de otro lado, se debía producir debido a que alguien estaba facilitando mi cuenta de correo creyendo que era suya, posiblemente de forma no deliberada. Alusiones a este enigmático personaje en los mensajes y otros mensajes distintos me llevaron a elaborar un perfil bastante detallado:

Varón de raza blanca en torno a los cuarenta o cincuenta años. Estado civil sin determinar, con una hija y en busca de pareja heterosexual de edad parecida a la suya. Residente en Barcelona, suscriptor a la agenda cultural de una librería de su localidad. Poder adquisitivo medio-alto en vista de los gastos sufragados a su hija y de las reservas en distintos Paradores Nacionales de habitaciones dobles. A veces se muestra algo intransigente en las conversaciones por tener convicciones muy arraigadas.  

Podía haber sido peor. El caso es que no puedo comunicarme con mi doble para decirle que A, B, C… jamás recibirán un mensaje de contestación lo cual me conmueve pues, como norma común, me gusta que el amor exista y gobierne por encima de todas las cosas.

5 de marzo de 2011

Azar

Hoy olvidé bloquear el móvil cuando lo introduje en el bolsillo. Tal si tuviera voluntad propia, el móvil inició, misteriosamente, la edición de un campo de texto. Cuando quise darme cuenta estaba al borde de mandar un mensaje dispuesto de la forma siguiente:

Tthybvvfnfvvvfffggggffggggvvvvffvfvffff

El uso de la letra g es lo que más me llama la atención.

1 de marzo de 2011

Visto en Madrid

Aquí vemos lo que parece un ensayo con plantilla. El escritor adopta para sus fines expresivos los iconos de los servicios públicos.

Graffiti en la zona de Tetuán. El segundo (quizás el primero también) pertenece a un escritor bastante activo por esa zona. Nos ha llamado la atención su trazo caligráfico.

También en Tetuán es frecuente ver pegatinas con anuncios de cerrajeros, anunciando sus servicios las 24 horas. Puede haber fácilmente diez en lugares donde parecen ponerse de acuerdo para anunciarse.