6 de julio de 2021

2.000

Redacción de Las torres de papel: Lo prometido es deuda. Acometemos la entrevista a El autor del viaje de Antonio, con motivo de haber firmado la cantidad ingente de dos mil temas, repartidos en algo más de ciento noventa y nueve álbumes. Sin que sirva de precedente, abordaremos un cuestionario prestado, rescatando unas preguntas que el fundador de la  orquesta ya ha respondido a su distribuidora. Comencemos. ¿Cómo describirías tu estilo?

Autor de El viaje de Antonio: Normalmente, si quiero responder a esta pregunta de forma breve y lacónica, declaro que hago bandas sonoras, aunque esto, como es lógico, viene a ser parcial e incompleto. Aunque quepa dentro de lo posible, no toda la música que publico es incidental. Cabría, en suma, precisar que hablamos de un estilo instrumental y electrónico, pero inscrito en patrones de música clásica contemporánea, ambiente o músicas negras, esencialmente.

Aunque muchos temas sean bastante modernos y hasta futuristas llegado el caso, digamos que el conjunto remite, por su sonoridad y concepción, a épocas pasadas más o menos remotas. Tiene, por tanto, la música de la orquesta, una orientación retro. Algún oyente lo ha definido en términos de música para gente mayor, lo cual viene a ser bastante aproximado. Entonces, hablaríamos de algo que no se encuentra adscrito a las tendencias más actuales, para bien o para mal.

R: ¿Por qué haces lo que haces?

Por pura vocación. Hay quien se involucra en actividades deportivas y hay quien acude a misa a rezar. La práctica deportiva puede mejorar bastante tu salud, tanto física como mental, e ir a misa… imagino también puede ayudarte en cierta manera. Para mí la música es como ir al gimnasio todos los días y también como rezar y encontrar un sustento espiritual.

De entre las muchas formas de definirlo puedo referirlo como una suerte de terapia. La música cuenta con un poder curativo y sanador incontestable, además de una enorme aptitud comunicativa y capacidad de sintonizar con la gente y sus estados de ánimo. No me atrevería a decir que tiene un poder transformador, quizás sí contestatario, pero a estas alturas de siglo ya nadie se toma demasiado en serio la idea de que el arte vaya a cambiar el mundo.

Ahora hago música, pero desde siempre me han interesado las artes de diferentes tipos. Viene a ser una inquietud que necesita encontrar materialización y, si no encuentra acomodo, sé de personas que pueden llegar a enfermar. Seguramente yo me encuentre entre esas personas.

R: Ambición o talento ¿Qué es más importante para ti?

Supongo que lo suyo es encontrar un equilibrio entre ambos. La ambición es como el motor de un camión y el talento es como la mercancía que transporta. Sin un buen motor el camión no irá muy lejos, aunque tenga una carga muy valiosa y sin mercancía, por muy largo que sea el viaje, será hasta cierto punto inútil realizarlo.

R: ¿Qué te inspira para crear música?

Los sonidos. Utilizo las fuentes de sonidos como si fueran colores, de manera intuitiva. Normalmente comienzo una canción y acudo en busca de sonidos primero. Cada sonido me sugiere una idea y esas ideas me llevan a otras. El conjunto de sonidos e ideas da lugar a la pieza, la cual será titulada a posteriori o comprendida bajo un concepto general. Este es el proceso más habitual, aunque en otras ocasiones trace el recorrido inverso, esto es, parta de una idea o concepto general y lo vista con sonidos.

R: ¿Cuál ha sido el mayor logro de tu carrera hasta ahora?

A lo largo de diez años ha habido muchos hitos, materiales e inmateriales. Quizá, de entre todos, deba destacar haber alcanzado la cifra de los dos mil títulos, junto con el hecho de que prácticamente cualquier día pueda aumentar esta cifra. Valoro mucho esto último, dado que no sé hasta cuando seguirá siendo viable.

R: ¿Cuál ha sido tu mayor obstáculo?

Yo mismo. Podrán asaltarte todo tipo de vicisitudes, pero la primera es tu voluntad. Si no luchas por materializar tu arte no darás pie a que surjan otro tipo de obstáculos.

R: ¿Cuál es tu peor y mejor fan de momento?

Sospecho que soy más fan de mis fans que los propios fans de mi música. Día a día repaso estadísticas, consulto tendencias y trato de saber todo lo posible. Y es que me importa mucho la gente que me escucha, aunque, como es lógico, no comparta todos sus posicionamientos.

El peor fan sería aquel que llevase el término hasta su última consecuencia. Por suerte, no ha aparecido. No sé quién será mi mejor fan, pero mi oyente preferido es mi novia. Ha de ser la única persona que ha escuchado toda la producción, asiste diariamente a las grabaciones, me ayuda con los títulos además de brindarme opiniones e ideas. En esencia, creo que es la persona además de mí, que más relación tiene con la orquesta. Soy un artista solitario, pero el valor de una segunda opinión es impagable.

R: Billie Eilish.

He estado últimamente tratando de desvelar el secreto de su éxito y cuando hice el anuncio de la entrevista, me propuse desgranar la cuestión. Sin embargo, al final ha acabado siendo un clickbait.

2 de julio de 2021